El siguiente gran juego, el rastreo, consiste en ir encontrando una serie de pistas, pueden ser piezas de un puzzle, trozos de una frase, fotografías, pistas, etc., para encontrar el premio final, según la ambientación que hayamos dado al día o al juego en concreto.

Es un juego que requiere gran preparación por parte de los monitores para colocar las piezas que marcarán cómo encontrar las pistas que decidamos incorporar. Podemos hacer las pistas con palos, dibujado en la arena, con folios escondidos, piedras, etc. Lo normal es hacerlo con objetos del entorno, para que sea más difícil de identificarlos, pero si no se poseen podemos hacerlo dibujado en papel.

Generalmente suele terminarse rápido, aunque para crear más dificultad podemos poner, en el recorrido algunos gazapos que hagan confundir a los participantes con alguna pista.

A continuación aparece el cuadro que se repartirá a los grupos de participantes para que consigan encontrar el premio final.